El puente

Mucha gente tiene un plan para el puente, aunque ya pasó.
Nosotros invitamos a unos amigos, de Cáceres, que ellos aceptaron.
Los niños jugaron al Hotel, menos yo.
Los mayores, conmigo, jugaron a la pocha e interferencias.
Nos divertimos mucho, sobre todo porque éramos muchos y así teníamos muchas ideas. Las primeras veces que jugué a la pocha no sabía qué había que hacer. Lo mismo durante el resto del puente. En interferencias los únicos que sabíamos éramos papá, mamá y yo. Nos divertimos mucho en el puente y yo me puse muy triste cuando se iban y con este artículo, con tan pocas líneas, demuestro todo mi puente.